Lamentablemente, ningún lugar está exento de los desastres que pueda causar la naturaleza; así que, aunque se tomen las previsiones necesarias, ningún ser vivo está totalmente a salvo de las posibles catástrofes que los elementos de la naturaleza son capaces de causar.
Un susto bastante grande se llevaron las autoridades de uno de los zoológicos más grandes del Reino Unido, el Zoológico de Chester, ya que alrededor de las 6 de la mañana uno de los techos inflables de la sección de bosque tropical fue cubierto por las llamas.
Muchos testigos aseguran que fue a las 6:30 de la mañana cuando el fuego empezó a producirse y posteriormente el viento ayudó a atizarlo haciendo que se extendiera por todo el lugar, esto puso en riesgo la vida de todos los animales que viven en esas instalaciones.
«Estábamos muy preocupados por la gente y animales que hubieran podido estar en la instalación», dijo David Clough, uno de los vecinos de la zona.
Al notar las llamas, los trabajadores del zoológico iniciaron con el traslado de los animales a lugares más seguros para mantener la situación bajo control en el área donde habitan gibones, cocodrilos, tortugas, y decenas de especies de aves.
Sin embargo, uno de las especies que habita libre en el espacio de esa sección son los orangutanes, lo que causaba gran estrés para los bomberos y empleados del zoológico debido a la complicada tarea que sería trasladarlos hasta otro lugar.
A pesar de las dificultades, los trabajadores y el cuerpo de bomberos lograron salvar la vida de todos los orangutanes de Sumatra que viven en su recinto.
Cuando hicieron el recuento de cada uno de ellos, significó una gran alegría para todos los que hacían parte de esta misión.
«Fabuloso esfuerzo de múltiples agencias para poner el fuego bajo control en el Zoológico de Chester. Excelente trabajo del personal del zoológico, también. Incidente muy complejo pero bien gestionado. Como resultado, todos los orangutanes fueron salvados y la mayor parte del edificio”, escribió en sus redes sociales, Mark Cashin, el jefe del cuerpo de bomberos de esa ciudad inglesa.
Todavía las autoridades deben determinar el origen de las llamas que comprometió la vida de más de 15 mil animales que residen en el zoológico de Chester.
Cabe destacar que esta instalación representa gran importancia para la ciudad desde el año 1931, y que desde su creación se ha dispuesto a proteger a especies en peligro de extinción, además de realizar más de 70 proyectos de conservación de vida animal alrededor del mundo.
Afortunadamente, los trabajadores del zoológico y los bomberos no permitieron que ninguna vida animal resultara herida ante esta catástrofe, y todos los amigos orangutanes están sanos y salvos después de que las llamas estuvieran, literalmente, sobre sus cabezas.
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