No es secreto para nadie que uno de los sueños más grandes de muchos niños, y no tan niños, es visitar alguna vez en su vida Disneyland y vivir en persona la fantasía de las películas de Disney que nos han hecho creer en mundos mágicos donde hay princesas y villanos estrafalarios, y en este caso, alguien muy especial tuvo la oportunidad de hacer su sueño realidad.
Este perrito estaba a punto de recibir un increíble regalo
Se trata de un perro de servicio con una personalidad muy dulce, llamado Elijah, que cumplirá dos años de edad en mayo y todavía se encuentra entrenando para ayudar a las personas sirviendo como un acompañante canino.
Parte de su entrenamiento consistía en interactuar con otras personas y dónde mejor para hacerlo que Disneyland
Pero mientras él termina con su educación, aprovecha de este tiempo para disfrutar también, pues su cuidadora, llamada Ashley Wilt y quien lo ha criado desde que tenía 8 semanas de haber nacido, tuvo la maravillosa idea de finalizar su entrenamiento con la visita a este lugar.
Pero no todo es siempre trabajo
Wilt trabaja como criadora de perros voluntaria para la asociación sin fines de lucro Canine Companions for Independence, quienes se encargan de juntar a personas que sufran de discapacidades con perros para que los ayuden de manera gratuita.
“Nuestra meta es criar perros confiables y que se ajusten a las situaciones, para que triunfen en sus entrenamientos y puedan trabajar como perros de servicio”, declaró Wilt.
Parte del entrenamiento de Elijah incluye acostumbrarse al contacto con extraños y nuevas situaciones, pero este no tiene que ser aburrido, como su criadora lo ha demostrado, por lo que decidió llevarlo al lugar más feliz de la tierra para completar esta tarea, ¡y vaya que el slogan del sitio concordó perfectamente con la reacción del perro!
La cuidadora de Elijah se toma muy en serio su trabajo y tienen muchas expectativas en el desempeño de él
A pesar de que el viaje no se trataba sobre tener vacaciones, Elijah pudo conocer a todos sus personajes favoritos, quienes estaban igual de felices por conocerlo. Gracias a esta experiencia, el perro pudo encontrarse con muchas situaciones a las que se tendrá que enfrentar en su entorno de trabajo, pues cada vez que tiene contacto con el mundo aprende algo nuevo.
Aunque su tiempo juntos llegó a un fin esta experiencia juntos nunca la olvidarán
Dentro de unas semanas el tiempo de Wilt junto a Elijah terminará y pasará a una nueva etapa de entrenamiento de la que se encarga la asociación. Pero gracias a esta experiencia ellos nunca se olvidarán el uno al otro.
“Aunque las despedidas siempre sean dolorosas, no hay nada como ver al perro que crié cambiar la vida de alguien que realmente lo necesite”, contó Wilt.
No cabe duda que Wilt y Elijah crearon un lazo verdadero e inquebrantable y gracias a el increíble compromiso de su criadora, ahora el mundo será un mejor lugar con un nuevo perro dispuesto a ayudar a alguien que necesite de sus servicios.
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