A diario vemos miles de comentarios negativos sobre el uso del microondas en la alimentación de las personas, pero este pequeño amigo convirtió este criticado aparato en un cómodo y cálido lugar para descansar y pasar la noche sin ser molestado por nadie.
Es muy posible que este joven zorro se haya cansado de dormir detrás de fríos contenedores o en lugares de poca seguridad y calidez.
Por lo que tuvo la iniciativa de entrar en la casa de la familia Fryer, en Rawnsley Avenue, en Mitcham, al sur de Londres, Inglaterra. Lo hizo a través de la compuerta de entrada del gato de la familia, y así colarse hasta ese cómodo lugar.
¡Qué gran sorpresa encontrarse con un nuevo visitante!
Al bajar a la cocina, Kate Fryer, se llevó una gran sorpresa al encender la luz y ver aquel hermoso animal de lo más tranquilo y muy cómodamente acostado en su cocina.
Derribó algunas macetas y desordenó un poco la cocina, producto de su curiosidad por conocer aquel nuevo lugar para él, pero mayor era su agotamiento que decidió acostarse sobre el microondas para pasar la noche.
«Tengo cinco gatos y un perro, así que obviamente tengo una entrada en la parte inferior de la puerta de la cocina para que nuestros animales entren y salgan de la casa”.
Al parecer, la presencia de Kate no le fue de mucho interés, y tampoco le causó angustia que le provocara una salida estrepitosa de aquel lugar.
«Encendí la luz de la cocina esperando que él hiciera algún movimiento rápido hacia la puerta del gato, pero en lugar de eso solo abrió sus ojos, me miró y no se movió».
Kate avisó a su madre Kim e inmediatamente llamó a la RSPCA (Sociedad Protectora de Animales, por sus siglas en Ingles), para que el joven zorro fuera llevado a un centro de rescate donde pudiera recibir atención médica para detectar una posible lesión o alguna enfermedad que pudiera explicar su extraña conducta.
Después de haber sido examinado por un grupo de veterinarios sorprendidos por el comportamiento de aquel joven amiguito, recibió su certificado de salud, alegando que no presentaba ningún problema.
Este lindo animal estaba apto para ser devuelto a la naturaleza.
«Cuando fue capturado parecía débil, después de haber recibido comida y atención se animó y el personal no encontró nada malo en él».
Los veterinarios y el personal de rescate concluyeron que estaba demasiado agotado y necesitaba un lugar cálido donde dormir.
Afortunadamente, estaba saludable y muy a gusto con el abrigado lugar que encontró para guarecerse. Eso de estar en una jaula no es lo de él. El pequeño zorro sentía mucha necesidad de retomar su vida nuevamente en el bosque.
Para Kate y para Kim fue una gran sorpresa encontrar a este huésped sin previo aviso. ¿Qué harías tu si un día en la mañana te encuentras un pequeño zorro en tu cocina? Comparte y déjanos saber tu opinión en los comentarios.