Justo un día después de la Navidad, las temperaturas en la región de Knox County (Illinois, EEUU) bajaron de forma alarmante.
Esta situación, además de representar una incomodidad para los habitantes de la localidad, resulta incluso peor para los animales. Sobre todo para aquellos que no tienen quien los cuide, y están en las frías calles desabrigados, sin protección y sin rumbo alguno.
El 26 de diciembre, la organización Knox County Humane Society recibió una llamada del dueño de un perrito, quien les explicó que su labradora negro dio a luz a una camada de cachorros en la intemperie, bajo la nieve.
Un equipo de rescate se trasladó hasta el lugar de los hechos y declaró después que el hombre había dejado a la perrita afuera, congelándose en las bajas temperaturas, sin notar que la pobre estaba embarazada.
«Creo que se trataba de una de esas desafortunadas situaciones en las que el perro únicamente vive afuera de la casa, se le alimenta a diario y allí queda todo...», dijo Curt Kramer, de la Knox County Humane Society.
Mejor dicho aún, el perro no vive, simplemente sobrevive. Son lamentables los casos en los que mantienen a los animales así, sin integrarlos en la familia, cuidarlos, o darles amor.
Cuando los trabajadores del refugio llegaron, ocho de los cachorros habían muerto congelados… Lamentablemente, no pudieron estar allí antes de que ocurriese la tragedia. Sólo uno de los pequeños sobrevivió milagrosamente.
«Es triste perder a los animales de esa forma… sabiendo que estarían bien si tan solo hubiesen llegado a este mundo dentro de la casa, en un espacio cómodo y cálido, en vez de estar allí fuera tirados», continuó Curt.
Por supuesto, la madre también sufrió mucho. Cuando la encontraron, estaba a punto de perder la vida a causa del frío, el dolor y, encima de todo, la depresión por los cachorros que no sobrevivieron.
«La temperatura de su cuerpo era muy baja, estaba por debajo de 35 y ese es un punto preocupante, pudo haberle dado hipotermia. Su piel estaba helada, sus orejas también».
La madre y su bebé son los sobrevivientes de esta trágica historia, y ambos fueron entregados al Knox County Humane Society, donde recibieron tratamiento y un cálido lugar para dormir. «Ahora a los dos les ha ido bastante bien, vamos a ver qué pasa. Después de que se recuperen serán puestos en adopción».
Es verdaderamente lamentable que, siendo una perrita embarazada que además tenía una casa, no haya recibido el trato que merecía. Ni siquiera se trata de uno de tantos perros que sufren en la calle, abandonados y muriendo de frío, ella tenía un lugar y en ese lugar la persona que estaba encargada de velar por su seguridad, se comportó muy mal.
Esperamos que se recuperen por completo y que sean adoptados por una amorosa familia que les de el cariño y los cuidados que tanto merecen. Comparte la historia con todos tus amigos.